sábado, 8 de enero de 2011

EL HONOR DE LA REINA.


¿Por qué hay gente que en su tarjeta de visita añade tras su apellido extrañas combinaciones de letras mayúsculas como GBE, KBE, CBE, OBE, MBE, etc? Son las siglas de diferentes distinciones que concede el soberano británico desde que en 1348 el rey normando Eduardo III creara "The Most Noble Order of the Garter", la Muy Noble Orden de la Jarretera. Dos veces al año, con ocasión del cumpleaños oficial del monarca, en abril, y con la celebración del Año Nuevo, cientos de británicos -y también algunos no británicos- son distinguidos con los honores de la reina en sus distintos grados y niveles. Una costumbre que forma parte del arraigado gusto de los británicos por sus pompas y tradiciones pero que ha generado también notables controversias lo mismo políticas que personales.

La lista de galardonados conforma una heterodoxa macedonia en la que carteros, profesores, asistentes sociales, médicos o enfermeras, a menudo propuestos por vecinos de su propia comunidad, se mezclan con empresarios, periodistas, altos funcionarios, militares, políticos, escritores, diseñadores y gentes del mundo del arte y el espectáculo cuyos títulos y distinciones pueden responder al genuino deseo de premiar sus esfuerzos profesionales o personales, pero pueden también formar parte de una menos inocente cadena de acontecimientos en los que la condecoración viene a ser una recompensa por servicios (o dinero...) prestados.